Hoy he tenido una conversación que me ha hecho reflexionar, y mucho, y minutos más tarde he leído esto que me ha puesto los pelos de punta. Gracias Mel por escribir cosas así...
Llorar hasta quedar inconscientes para volver a recuperar la razón, la única forma de volver a ser conscientes de lo que nos ha estado limitando y traumatizando. Aceptar nuestros errores y carencias para saber como volver a pedir lo que necesitamos al mundo, pero sobre todo, saber como pedirlo. En silencio y en soldedad somos capaces de reflexionar y quedarnos con el espejo de nuestros propios yo, esos que se esconden y no nos permiten saber que pasa y porqué, caminando sin rumbo aparente y cayendo en el abismo de nuestras propias mentiras.
No lloramos pues nos enseñaron a ser fuertes, no necesitamos nada de nadie pues nos enseñaron a ser autosuficientes, no nos miramos por dentro pues nos dijeron que no habia tiempo y que el problema era del resto. Lo que en la vida nos ha pasado es necesario asimilarlo y guardarlo correctamente, el dolor hay que experimentarlo anexandolo a un duelo, a una etapa oscura... de lo contrario se convierte en rencor y odio, manipulando cada acción, cada conducta erronea, sin saber porqué imitandonos y haciéndonos cada vez más ignorantes de nosotros mismos.
Tenemos un cerebro demasiado listo que sabe perfectamente como tapar agujeros para que no sintamos frustacion y pena. Solo al descubierto y en la total liberación de sentimientos es posible saber que va bien, pero sobre todo que va jodidamente mal, no importa cuanto tardemos en saber qué y porqué nos comportamos o pensamos de una forma equivocada, lo importante es ser humildes con nosotros mismos y descubrir en algún momento que realmente nos hemos estado engañando todo ese tiempo, que realmente nos duele aun aquella herida, que aparentar felicidad llega a hacerse un callo en la consciencia, que jamás sentirás sensciones de felicidad a menos que aceptes que hoy no lo eres, que hoy no tienes más que malos recuerdos y erroneas añoranzas que hoy es dia de llorar hasta que duelan las pupilas, de esconderte y sobre todo que tienes ganas de caminar erguido, de ser mejor persona sin remordimientos ni miedos, que realmente no eres una máquina automata sin afectos, que necesitas al mundo, pero solo evadiendote del mundo aprenderás a vivir en él. Que la gente no es quien realmente dice ser, que siempre hay dos mundos el sociable y individual, que la vida es del color con que se mire y nadie va a llegar a pintartela a menos que antes ya hayas comenzado a disfrutar sus colores.
Pero sobre todo que la neurosis tiene cura a menos que no enfermemos de ella.
Y después de esto no tengo nada más que decir, solo ¡¡¡gracias!!!
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